P. Castillo

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miércoles, 5 de febrero de 2020


REDES SOCIALES


Mientras voy preparando la entrada del último libro leído hace unos días; “Países imaginarios”, un ejemplar con magníficos cuentos de Ursula K. Le Guin , daré paso a mis recientes  caminatas.


"Países imaginarios"; Ursula K. Le Guin. Foto de Paco Castillo.



Están siendo jornadas con densas nieblas matinales por aquí.







Fotos de Paco Castillo.


Esto me supone un gran atractivo, ya que es la situación ideal para disfrutar de unas cuantas REDES SOCIALES...





Fotos de Paco Castillo.

Aunque para lograrlo tiene que haber una serie de condiciones, lo mencionado arriba; bruma matinal, observar y “leer” los mensajes que te ofrece el entorno.







Fotos de Paco Castillo.



Se trata de adoptar la actitud que refería Rousseau en sus "Confesiones".





                                       Fotos de Paco Castillo.


Al contrario de lo que sucede en otras redes sociales, virtuales para más señas, en donde todo parece estar sometido a la tiranía de lo inmediato, a las prisas de nuestra época, con la obsesión de conseguir esos “likes” en tiempo record…  esas cosas contradicen la esencia de estas REDES SOCIALES,  son aspectos innecesarios con tales protagonistas.


Fotos de Paco Castillo.

Solo te exigen una actitud; la calma, desacelerar el ritmo existencial, y caminar sin prisa… no es fácil en estos tiempos, pero siempre podemos observar y tomar nota de otros.



Fotos, Paco Castillo.


Sin olvidar que esto no se puede gozar en olor de multitudes, como si fuéramos una marabunta de turistas, pues nos ganaríamos a pulso el reproche de Nietzsche, quien ya en 1880, al publicarse “El viajero y su sombra”, señalaba algunas aspectos que hoy están en plena vigencia.




Fotos, Paco Castillo.


Bueno, os dejo, yo prosigo mi peregrinar entre charcos invernales, acompañado por la poesía del chileno Omar Lara, que tiene alma peregrina también.


De esa agua no beberá

El reflejo de su rostro en el estanque es un prodigio de la imaginación.


Carne de peregrino.

Omar Lara



"Memoria", Omar Lara. Foto, Paco Castillo.



Voy a ver cuantas gotas de rocío me ha dejado la RED, esta no usa likes para coleccionar…



Foto, Paco Castillo.

19 comentarios:

  1. La foto de la mariquilla es sensacional ¡
    la de la telaraña me gusta un montón, pero la de la mariquilla es metafórica.
    No es el autor que nos enseñas quien me hace tilin, pero hay que leerlo para saber de y porqué habla de esa manera. Por cierto, autor para leer en soledad.
    Un abrazo

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    1. Esa foto de la mariquilla es una de mis preferidas también, amigo Miquel, y lo es por todo lo que puede evocar, sí, una foto muy evocadora. Nietszche era una mente muy contradictoria, pero esa es condición sine qua non para atravesar senderos filosóficos poco trillados, y Nietsche transitó unos cuantos, de todas formas uno comulga más con unos filósfos que con otros, como nos ocurre a todos, a mí me gusta leer leer a Schopenhauer y otros lo rechazan, hay para dar y tomar, sin duda.
      Un abrazo!

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  2. Hace dos años que eliminé mis perfiles totalmente de Facebook, Instagram y Twitter, y hoy soy un hombre sin redes sociales sino las que me aporta la literatura y la escritura íntima. El ser social ha dejado de atraerme por completo, y prefiero como tú mis paseos por el campo -ójalá tuviera tanta naturaleza como la que tienes tú para perderme en ella-. Esas redes sociales que nos traes son mucho más poéticas y hermosas. Una vez, hace mucho tiempo, cuando era joven y trabajaba en una cooperativa de frutas en Lérida, tenia una gran araña a la que llamé Carolina. Capturaba moscas para dejárselas en su red y observaba cómo Carolina se iba aproximando a la aterrorizada mosca y le iba chupando sus jugos para dejarla en pura cáscara vacía. Desde entonces tengo a las arañas como una mezcla entre lo literario la crueldad. No conozco al poeta chileno que nos traes. Solo sé que ayer terminé de leer un libro bastante corto que me dejó absolutamente conmocionado: La pasión según G.H. de Clarice Linspector, y en él aparecía de forma destacada una cucaracha. No digo más. Uno de los libros más fascinantes que he leído. Eso sí, no es apto para todas las inteligencias o sensibilidades. Es un libro tan opaco como transparente. Para leerlo me recluí en un centro tecnológico al que voy todas las mañanas a leer y escribir. Me ha gustado pasear contigo y aprender de tus redes sociales. Es posible que el viernes haga una caminata matinal, ya te contaré.

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    1. Hola, Joselu.
      Algo sabía sobre ese abandono voluntario de las redes sociales que me cuentas. Yo no tengo Instagram ni Twitter, en cuanto a Facebook me registré en el 2008, y algunos meses más tarde de ese mismo año cesé toda mi actividad ahí, lo probé, me dije: "ah, pues ya está, a otra cosa mariposa" hasta hoy, que sigo sin actividad alguna. En mi caso no diría que el ser social ya no me interese nada, pero sí es cierto que prefiero refugiarme en la soledad, pasear por el campo es toda una filosofía de vida para mí, y lo es porque constituye un aprendizaje continuo, a partir de vivir la experiencia en soledad, es una relación con el entorno y con mi "yo" muy estimulante... sería difícil de entender por alguien que huye despavorido de cualquier cosa parecida a la soledad.
      Lispector me consta que era otra gran solitaria, siempre me fascinó, la he leído en un par de obra; "Un soplo de vida" y "Silencio" y de la escritora hace mucho que tengo apuntada una frase memorable, o a mí me lo parece:

      “Vivir es una especie de locura que la muerte comete. Porque en ella vivimos, vivan los muertos”

      Me impacta esa idea, el hecho de que al nacer... ya estamos muriendo.
      Pero esa Clarice, rompedora con sus sentencias. Gracias amigo, a mí también me agradó tu compañía, espero que me cuentes tus paseos, desde luego.
      Cuídate.

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  3. ¡Hola Paco! Me encantan estas redes sociales que hoy nos muestras y que compartas con nosotros tus paseos por el campo, tu "vagar perezosamente por los bosques y la campiña, como dice Rousseau observándolo todo, fotografiándolo todo
    Besos

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    1. Son bonitas, ¿verdad? Ya sabes que por mi blog es fácil perderse... entre paseos campestres, todo muy sano, jaja.
      Gracias por tus palabras, Marian, siempre se agradecen.
      Besos!

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  4. Preciosas tus redes sociales, Paco. Creo que hay que salir un poco antes de lo que yo lo hago para ver esas alucinantes telas. A mí, de todas formas, me las dejan en casa, en el jardín, en el coche entre el retrovisor y la puerta, en las ventanas... son las ventajas de vivir en un pueblo.
    No conozco a ese poeta chileno y ya sabes que la poesía tampoco es lo que más me atrae a la hora de leer.
    Un beso.

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    1. Hola, Rosa. No soy un gran lector de poesía, sin embargo es verdad que desde hace unos pocos años voy leyendo cada vez más, y siempre ha sido una experiencia muy gratificante, tengo claro que seguiré en esa línea ascendente.

      Sí, son unas "redes sociales" preciosas, madrugar sería lo suyo para observarlas con esa prestancia, pero si te rodean por casa, pues tienes buena oportunidad para verlas con calma, son buenas aliadas contra otros insectos más molestos.
      Un beso.

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  5. Impresionantes redes sociales las tuyas, que belleza tejida con paciencia. La misma que tú haces servir en tus paseos para poder disfrutar y hacernos disfrutar a tus visitantes con tus fotos de esos envidiables paseos.

    Un abrazo.

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    1. Y cuando las observas in situ, de cerca, la impresión es mayor, son realmente fascinantes estas obras de ingeniería natural, e impregnadas de rocío, pues... espectaculares, aprendo mucho observando estas cosas, y a la vez disparan mi imaginación.
      Un abrazo!

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  6. Qué cosas, leo redes sociales y enseguida pienso en las virtuales. Cómo tenemos sorbido el cerebro.
    Siempre me ha parecido algo extraordinario las telas de araña y he visto cierta belleza en ellas. A la vez me producen algo de repulsión, pues he de reconocer que no hago muchas migas con sus productoras. En fin, cosas de urbanita que ni siquiera ha tenido pueblo de niña.
    Un abrazo

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    1. Esa asociación la hacemos todos, Lorena, no eres la única. Como ya comenté arriba son obras de ingeniería natural de una eficacia y perfección sin parangón, por eso los arquitectos e ingenieros humanos copian tanto a los insectos en sus diseños y estructuras. La fobia a las arañas es universal, a mí me caen simpáticas... las inofensivas, claro. En la ciudad hay mucho que admirar también, sobre todo en la tuya, tan bella.
      Un abrazo.

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  7. Meidentifico con esa manera de vagar y absorber la calma que me produce la naturaleza. Esa contraposición al mundo rápido, de exigentes prisas y falta de tiempo que suelo tener entre semana. Tus fotos espectaculares, la niebla produce paisajes que parecen irreales, que confunden y que a mi me hacen reflexionar sobre lo que vemos, su realidad y como cambian según el momento, el tiempo y la mirada.
    ¿Redes sociales? El blog es una de las que sí frecuento y me encanta. Las otras, tengo alguna que uso de forma puntual, lasuso pero no abuso ni vivo ni en ellas ni a través de ellas.
    Las arañas no me gustan mucho pero sí me fascinan sus telarañas, sobre todo de buena mañana cuando están llenas de gotitas de rocio y parecen unas preciosas joyas, eso sí tengo que reconocer que si alguna vez he visto algun insecto que acaba de ser atrapado por esas redes no puedo evitar ayudarlo a escapar. Sé que la araña no me estará agradecida.
    Las mariquitas siempre me producen ternura y las asocio a la niñez, me gustaba cogerlas con cuidado, ponerlas en mi dedo y ver cómo abrían sus alitas y volaban. Preciosas.

    Me voy con una sonrisa.
    Besos querido Paco

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    1. Siento algunos errores que se me han colado por el teclado, en mi caso el móvil me es complicado para escribir.
      Besos

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    2. Esos errores con el móvil están a la orden del día, amiga Conxita, a mí me sucede bastante.

      Los paisajes nublados me resultan muy inspiradores, metafóricos, son como de cuento e ideales para la fantasía, jaja.

      ¿Blog como red social? no veo que el blog termine de encajar en lo que ahora define a una red social, de hecho la mayoría de expertos (lo puedes ver en internet) hacen la distinción entre una bitácora (o blog) y las redes sociales como Facebook, Instagram, Twitter y demás, considerando que blogs y redes sociales no son sinónimos, pueden ser complementarios, y a veces funcionan de forma relacionada, eso sí, pero son dos cosas diferentes, con naturalezas muy distintas, empezando por la inmediatez de los mensajes en las redes sociales, que han de actualizarse constantemente, y en el blog el mensaje, o entrada, no tiene ese imperativo de caducidad, puede permanecer ahí mucho más tiempo ( a veces meses). Por eso mismo en la red social el mensaje es corto... el usuario lo consume con rapidez, no hay tiempo que perder... en el blog es justo lo contrario, un mensaje o contenido mucho más extenso, precisamente para leerlo con pausa y detenimiento, bueno... y suma y sigue con otros detalles relevantes, jeje. Consideraba pertinente exponer estos aspectos.

      Aynns las arañas, tienen mala fama, desde luego, pero te digo lo mismo que le comenté a Lorena, hay arañitas muy chulas, nada de esas otras matonas que dan repelús, jaja.
      Las mariquitas siempre "guays", por supuesto, mi hija mayor hace ahora lo mismo que tú hacías de niña con las mariquitas, las tomaba en su mano, y en un tris echaban a volar ;)

      Gracias, querida Conxita. Besos.

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  8. Llevo unos días que cojeo por el lado de Whitman, así que pondré otra pica en tu árbol o arbusto

    Una araña paciente y silenciosa,
    vi en el pequeño promontorio en que
    sola se hallaba,
    vi cómo para explorar el vasto
    espacio vacío circundante,
    lanzaba, uno tras otro, filamentos,
    filamentos, filamentos de sí misma.

    Y tú, alma mía, allí donde te encuentras,
    circundada, apartada,
    en inmensurables océanos de espacio,
    meditando, aventurándote, arrojándote,
    buscando sin cesar las esferas
    para conectarlas,
    hasta que se tienda el puente que precisas,
    hasta que el ancla dúctil quede asida,
    hasta que la telaraña que tú emites
    prenda en algún sitio, oh alma mía.


    Gracias por el momento, bello, que (me) has dado con esta entrada

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    1. Me haces un bello regalo, amigo Wineruda, la poesía de Whitman es el colofón perfecto para este paseo entre telarañas prendidas de rocío.
      Gracias a ti, cuídate!

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