P. Castillo

Safe Creative #1802170294390

viernes, 25 de septiembre de 2020

 

Y me cazó el virus…


Tenía pensado asomarme por aquí el pasado 22 de septiembre por dos buenas razones que al final se fueron al traste; la primera (no importa el orden), comentar la llegada del otoño, algo especialmente jubiloso para mí. La segunda por ser mi cumpleaños (53), fecha que como habréis notado coincide con este equinoccio.

De hecho mi cumpleaños tiene una atractiva peculiaridad,  cada año es, o bien el último día del verano o el primero de otoño. Esta vez ha sido el primero del otoño, el pasado fue el último del verano... y así cada temporada, lo de renovar, lo cíclico, es consustancial a mí, tengo algo de cigarra.

Pero la realidad a veces se presenta con una hoja de ruta para ti que ni remotamente habrías imaginado, y aún menos deseado.

Esa mañana del 22 estaba “raro”, tenía escalofríos, malestar general, febrícula (37 y pico, a veces 38), un poco de tos, cansancio, aunque sin ser inhabilitante. También soy un tipo muy resistente.

Ante el sombrío panorama, llamé a mi hermana para que recogiese a las niñas, mejor que con mi madre, y mandé un whastapp a mi mujer que estaba en el trabajo. Almorcé, ya que era más de mediodía y rápidamente fui a urgencias de Puerta Hierro en Majadahonda, lo tengo muy cerca.

Soy paciente de riesgo, un tema oncológico ya lejano, del 2011, con su correspondientes sesiones de quimioterapia (6 meses) y demás tratamientos, que allí se quedó. Acudo a las pertinentes revisiones anuales. Sin señales. Nunca me alteró el ánimo y daba una absoluta apariencia de normalidad que dejaba asombrados a familiares y amigos, pero tenía muy claro como afrontarlo, si yo mostraba normalidad y buen talante, eso se contagiaría a quienes me rodeaban, y así fue, ahí me apunté una gran victoria.

Seguimos. Debido a este historial clínico, lo prudente era dirigirme raudo a urgencias del hospital.

Estuve desde las 16:00 hasta las 23:00 en la sala para enfermos y sospechosos Covid, me hicieron analíticas, placas (afortunadamente no había neumonía) aunque si cierta infección respiratoria, y por último la pcr ya cerca de las 23:00.

Estuve con otras personas, algunas con muy mal aspecto (un chico de unos treinta años sentado en una silla de ruedas, exhausto y sudoroso), todos relativamente jóvenes, conscientes de tener el maldito virus en el cuerpo, igual que yo. Por fortuna este hospital no es de los que están en riesgo de colapso, como ocurre en otros de la CAM.

Así, con una vía en vena (paracetamol), fue mi jornada de cumpleaños, solo en la sala de espera Covid, como el resto.



Al día siguiente me confirmaron el positivo. Ninguna sorpresa dados los síntomas.

Al menos mi caso no es de hospitalización, a recluirse en mi habitación, tomar los antibióticos prescritos y esperar.

Ya digo que, a pesar de ser paciente de riesgo, soy una persona fuerte. Mi oncóloga bromeaba sobre la posibilidad de proponerme para un estudio, pues no conocía a nadie en el hospital que tras una sesión de quimioterapia (eran 5 horas por la mañana en lunes alternos) se fuese a caminar 8 kms por la tarde, el martes tenía bajonazo y descansaba, pero el miércoles ya empezaba a mejorar, y jueves y viernes directamente me iba a correr unos 10 kms cada vez… a trote muy lento. Ella, sin olvidar toda prudencia para conmigo, me soltaba: chico… si te lo pide el cuerpo, pues “palante”.

He sido muy deportista toda la vida, de enormes desafíos, eso me ha ayudado a pasar grandes dificultades con el ánimo a prueba de bomba.

Lo mismo me daba por subir tramos de los Andes corriendo alegremente.


Asciendo a la carrera  por la montañas andinas, Perú.

Atravesar países a pedaladas.

En esta ocasión por Finladia


O carreras de larga distancia por las montañas de aquí, competiciones de esas que te tiras varias horas corriendo 50 o 60 kms por riscos rompepiernas, magníficos recuerdos de las carreras de la Copa de Hierro madrileña (Federación de Montaña), y además hacía buenos puestos.


 



Ahora ya estoy más relajado, pero desde muy joven me he machacado de lo lindo.

Aquí más jovencillo, practicando boulder.
.

Una sesión de alpinismo.

Saco todo este pasado deportista a colación porque me ha proporcionado lecciones muy valiosas a lo largo de mi vida, y ahora con esto del virus y antes con lo oncológico, siempre las tengo presentes.



Con la impagable ayuda de mi cuñado (una especie de cocodrilo Dundee en su región), abriéndome paso por la “ceja de selva” amazónica, Perú.

 

Y de nuevo corriendo por mis adoradas montañas…





Me he vuelto tarumba pensando donde y como me ha cazado el coronavirus; no me desplazo a ningún lugar de trabajo, no necesito usar transporte público, me relaciono con poca gente, disfruto la soledad… aunque no soy antisocial. Suelo pasear largo tiempo por el campo, siempre solo. Si tengo que hacer cosas por mi localidad jamás me quito la mascarilla y siempre con el gel hidroalcohólico a cuestas.

En fin, ya que más da, viendo la desastrosa situación en Madrid, la pregunta de moda no es donde ni como… sino cuando te tocará a ti.

No he visitado la blogosfera últimamente. He dudado hasta el último segundo en publicar esto, me da pudor mostrarme con este tipo de intimidades. Sin embargo considero que es una experiencia valiosa para compartir. Y, como no, repasar este periplo deportivo de mi vida, porque le ha dado mucho sentido a la misma, y en estos momentos me mantiene con una actitud estóica ante el infortunio.

 

Ojalá esto sirva positivamente para alguien. 


Y nada más, bueno sí… este vídeo va por ti, jodido virus, a ver por donde atacas a todo este mogollón, ¡so cabrón!:

Born to be alive... no os lo perdáis



 


 


31 comentarios:

  1. En mi casa también hemos estado de cuarentena por el contacto de mi mujer, la abuela y mi hija con un positivo en un funeral en Galicia. Afortunadamente la PCR salió negativa pero mi mujer todavía no se ha podido reincorporar al instituto donde trabaja pues no le han dado el alta. Nos ha rozada pero no nos ha tocado. No obstante veo que puede ser en cualquier momento. Yo no hago vida social, pero mis hijas quedan con sus amigos en pisos y en restaurantes donde no hay mascarilla y puede llegarnos en cualquier momento. Nunca lo había sentido tan cerca y tan amenazador. Se habla de un nuevo estado de alarma.

    Te felicito por tu ánimo y resistencia frente a la adversidad curtida en el deporte. Ciertamente alguna influencia tiene que tener. En nuestra casa tenemos a la abuela que padece cáncer desde hace más de treinta años con sucesivas metástasis. Su resistencia es insólita e ilógica -me dijo un día la oncóloga-. Está con quimio ininterrumpida desde hace años, le van cambiado los medicamentos pero ahí tiene las lesiones en el hígado abiertas -antes en el pecho y en las cervicales-. Y ella tiene buen ánimo y no ha hecho deporte para nada. Pienso que la resiliencia es una cualidad que va con el carácter, es una forma de estar en el mundo. Yo soy mucho más lábil y pienso que lo pasaría mal porque soy muy obsesivo.

    Espero que pases la cuarentena y el proceso lo mejor posible, lo normal es que no haya complicaciones salvo algo de fiebre y algunos síntomas más. Aprovecha para tus ensayos con que nos ilustras. Acabo de leer uno muy curioso, El único y su propiedad (1849) de Max Stirson del que hablé en un post. Es una defensa radical del egoísmo frente al cristianismo, el humanismo, el liberalismo, el comunismo que siempre supeditan el Yo ante el colectivo. En ciertos sentidos adelanta la idea de superhombre nietzscheana así como la idea de amor fati. Me ha hecho pensar mucho aunque lo considero un desvarío intelectual.

    Ahora leo El hombre invisible de Ralph Ellison, una verdadera obra maestra sobre la negritud, las reflexiones sobre el hombre negro en una sociedad de supremacía blanca. Tal vez esta lectura ha estimulado mi último post.

    Nada más, Paco, unos días de reposo y lectura, además de aislamiento y lejanía de los tuyos, y a volver más fuerte.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que barbaridad lo de la abuela, Joselu, eso sí que es para un estudio, me dejas ojiplático.
      Y tienes razón, sin haber hecho deporte está eso que llamamos resiliencia y te hace ser de una pasta especial, es alucinante.

      Por un lado o por otro, todo ciudadano de este país, o bien le toca hacer cuarentena por contacto con positivo, o le toca a uno mismo, yo ya he perdido la cuenta de familiares o amigos que han tenido que guardar cuarentana por ser contacto estrecho, (también conozco a positivos de mi entorno, aunque no estuve en contacto con ellos), en el cole de mis hijas faltan alumnos todos los días por eso. Aquí la cosa se jodió bien, es lo que hay.
      Pues en mi caso si que ha tenido influencia el deporte a la hora de afrontar muchas cosas, cuando se presenta alguna dificultad siempre pienso en mis experiencia de correr por la montaña... 5 o 6 horas seguidas en condiciones muy adversas a veces, sufriendo bastante, eso me ha enseñado a no tirar la toalla y luchar, como hacía en las competiciones, al menos para mí ha sido muy aleccionador.
      A penas he tenido fiebre, aunque sí una tos molesta y malestar general, pero todo perfectamente asumible en casa... hay gente que sin ser paciente de riesgo como yo lo ha vivido mucho peor.
      Tienes lecturas interesantes entre manos, no está mal enfrentarse de cuando en cuando a un desvarío intelectual como el que sugieres de Max Stirson. El de Ellison se me antoja lectura apasionante.

      Un fuerte abrazo, amigo Joselu, gracias por la compañía.

      Eliminar
  2. Esto está mal , PACO. Mi señora, hoy jubilada, ha sido durante 43 años enfermera de coronarias del Clinic. Tengo dos sobrinas en el Oncologic, tres en Parc Taulí, Sabadell, y una prima en el Clinic, todos trabajado en Sanidad. No diré en que puestos, pero en la rama. Si diré que dos de los nombrados dan clases en la Facultad de Medicina además de trabajar.

    hemos llegado a la saturación. Cuando se sobrepasa el 25% de las camas para una enfermedad y se comienzan a ocupar por otras enfermedades, se considera saturación. Vamos el 30% y en aumento.
    Eso impide que entren en hospital y ocupen las camas las patologías que tenían previstas esas camas.
    Todas las pruebas han quedado anuladas. de tal manera que las biopsias y las citologías también, y está ahora a la espera de que te llamen. Eso puede tardar un par de meses más en el mejor de los casos, eso más los que llevas en espera puede dar que un cáncer que en principio era "sujetable", al cabo de cuatro meses más ya no lo sea.
    Y no hablemos de los sanitarios. Están al borde del colapso.
    La sanidad Pública, con Boi Ruiz a la cabeza (personaje director de las privadas en Cataluña puesto a dedo por Mas en el 2012) se ha ido a la mierda.
    Los laboratorios de la sanidad pública tardan 6 dias en darte un resultado. Los de las privadas, uno, y resulta que muchos análisis de los hospitales públicos recaen en laboratorios privados, y se les paga por ello. ¿a ver cómo se entiende?
    Total, un verdadero desastre que traerá mucha cola, pues sin sanidad no hay economía. Eso es seguro.
    Que te mejores. Ánimo ¡¡
    salut

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues sí, Miquel, la cosa está bastante jodida, imagínate que escenario nada más comenzar el otoño, yo ya no me atrevo a dibujar el futuro... prefiero no rallarme.
      Sabía de toda tu estripe familiar en el sistema sanitario, no dejo de pensar en el esfuerzo sobrehumano que están haciendo, sin ayudas de los poderes políticos, aquí en Madrid ya es una especie de barco a la deriva y los que debían pilotarlo ya no saben ni por donde se andan, es dantesco.
      Da mucha pena todo, querido amigo.
      Gracias por la compañía, Miquel.
      Salut

      Eliminar
  3. ¡Mi querido Paco! Fíjate que ya te estaba echando yo de menos por aquí, y a tus reseñas campestres. Yo sí pienso que haber estado toda la vida haciendo deporte y tener una vida sana, influye en como el cuerpo reacciona para vencer situaciones adversas (virus, temas oncológicos, etc) Está todo muy mal, da miedo y pena, pero no queda otra que intentar protegerse lo mejor que podamos y no bajar la guardia nunca (distancia más mascarilla siempre) pero es complicado, sobre todo porque a veces podemos despistarnos y encima hay muchos asintomáticos, que sin saberlo pueden infectarte.

    Espero que todo pase pronto y también espero que tu mujer y tus hijas se libren del puñetero virus. Soy consciente de que todos vamos a acabar pillándolo, aunque no está demás intentar protegerse todo lo que se pueda, no es fácil.
    En mi biblioteca vamos a trabajar sintiéndonos más o menos seguros, porque los usuarios no pasan dentro, servimos pedidos como si de un supermercado se tratara, pero no queda otra. Se echa tanto de menos la vida de antes, el trabajo como era antes...
    Seguro que aprovechas estos días de total aislamiento para leer mucho, tu post me ha gustado, me ha servido y te lo agradezco, aunque asusta un poco saber que aún tomando todas las medidas te has contagiado.
    En fin Paco, mucho ánimo y paciencia, que seguro todo saldrá bien y mira el lado positivo, estarás inmunizado durante un tiempo
    Besos fuertes y cuídate mucho

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola, querida Marian!
      Pues ya ves, amiga... me tocó. Yo también estoy convencido que mi pasado deportista me ha dado una fortaleza física y mental que me es de gran ayuda en las adversidades.

      Tú y yo, que vivimos relativamente cerca, sabemos que el panorama por aquí es desastroso, fíjate que ya en otoño y aún seguís trabajando con esas medidadas en la biblio, toca cuidarse como nunca. Algún día veremos la luz, esto no durará tanto, ya verás.
      Bueno, Marian, es una alegría tenerte por aquí, ya lo sabes ;)
      Besos y a protegernos.

      Eliminar
  4. Ay, paco, espero que estés totalmente recuperado y que tu familia se libre. No sé si alguna vez recuperaremos la normalidad antigua, porque la nueva no tiene nada de normalidad.
    Sabía que te gustaba caminar, pero nunca imaginé que el deporte de todo tipo hubiera sido tan importante para ti. Seguro que eso te ha ayudado en tus problemas de salud para recuperarte antes y mejor, tanto en 2011 como ahora.
    Espero que pronto recuperes la normalidad total y volvamos a verte por aquí asiduamente con tus libros, tus fotos y tus paseos.
    Un beso muy fuerte (como es virtual puede serlo).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ay, Rosa, al final mira con que entrada vengo... ya me hubiera gustado aparecer contando alguna lectura, o cualquier asunto menos este, pero también me dije: está bien, te ha tocado, sería bueno trasladar esta experiencia y compartirla.
      Así que aquí estamos. Afortunadamente mi caso no es de hospitalización, más allá de determinados malestares, pero puedo afrontarlo en casa, y eso ya es importante.
      Como bien dices, espero volver a la normalidad, aunque eso parece lejano para todos, sanos y afectados.
      Un beso virtual para ti, Rosa, y gracias siempre por tu apreciada compañía.

      Eliminar
  5. Hola Paco, me alegra que te estés recuperando, vaya manera de pasar el cumpleaños y el inicio del otoño. Muuuuchas felicidades.
    Como bien dices el problema ya ni siquiera es quién te ha contagiado sino ese cuándo toca y esperando que entonces sea leve. De momento no hemos aprendido nada y parece que no somos capaces de controlarlo. La sanidad pública ha sufrido muchos recortes y ya estaba en una situación muy preocupante y ahora con esta pandemia todo eso nos está pasando factura, eso y después muchos incompetentes y también mucho irresponsable.
    Desde luego entiendo que tu oncóloga estuviera sorprendida, qué barbaridad, aunque lo importante es lo que te decía, si tu cuerpo dice que adelante pues hazlo. Es tan positiva esa actitud de no rendirse y también es difícil superar esa adversidad con ese buen ánimo y ganas.
    Me parecen muy importantes las enseñanzas que nos da el deporte y lo mucho que nos ayuda a aliviar tensiones y a sacar lo mejor de cada uno.

    Un abrazo y esperando como dice Rosa pronto ver tus paseos con libros.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un cumpleaños diferente... la verdad. NUnca hubiera imaginado verme en esa tesitura para mi 53 cumpleaños, pero aún hubiera sido peor quedarme en el Hospital ingresado, alguna lectura buena tengo que sacar, Conxita. El asunto está feo, aquí en Madrid, el gobierno regional siempre ha establecido medidas en donde la peso económico ha sido más relevante que el sanitario, pero no lo podían haber hecho, aunque en el resto del país tampoco están para tirar cohetes. Por no hablar de los irresponsables que siguen actuando como si nada.
      Cuando escribía lo de mi vida deportista, también me acordé de ti, sé que eres una buena deportista y que lo leerías con cierta complicidad, tú sabes bien lo mucho y bueno que te da el deporte, ¿verdad, Conxita?

      Me alegro mucho de tenerte por aquí, un fuerte abrazo ;)

      Eliminar
    2. Cierto Paco, comparto contigo lo bueno que es el deporte a nivel mental y físico.
      Esta situación del virus se descontrola por todas partes y asusta ver lo poco capacitados que parece estamos para pararlo. A cuidarse mucho.
      Besos

      Eliminar
  6. Espero que te estes recuperando bien, y te felicito por este post cargado de esperanza y de felicidad, sí, así lo he sentido. El ánimo contra las adversidades que nos pone la vida es fundamental. Me imagino que habrás leído a gente como Victor Frankl que habla tanto de ello. La única enfermedad más o menos importante que he sufrido fue hace unos pocos años que me atacó la tuberculosis, sí, la tuberculosis. Y yo pensando que estaba más que erradicada. Me dejó unos meses metida en casa que los aproveché para leer a tope. Un abrazo muy fuerte! Yo espero que dentro de un tiempo podamos bailar como los del video, todos juntos y con esa gran alegría.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Esther. Me encanta si te he trasmitido esperanza y felicidad, pues muuucha falta nos hace en estos tiempos. Tengo el libro de Viktor Frankl (El hombre en busca de sentido) pero curiosamente no lo he leído, algunos pasajes sueltos, eso sí.

      Vaya, me dejas asombrado con lo de la tuberculosis, al menos aprovechaste el tiempo de enfermedad.
      No estaría nada mal recuperar esas sensaciones del vídeo, claro que no.

      Gracias por tu presencia, cuídate mucho.

      Eliminar
  7. Convéncete, Paco, no hay cáncer ni virus que te tumbe. Me alegra que puedas pasar la enfermedad en casa y espero que tu familia esté bien.
    Por más precauciones que se tomen el riesgo cero no existe. Y estando la situación como está, sobre todo en algunas comunidades como es Madrid, al final efectivamente y como bien dices la pregunta es cuándo le tocará a uno.
    Espero que pronto te liberes del virus y se quede todo en una anécdota.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Lorena. Pasar la enfermedad en casa ya es mucho, viendo como lo han pasado tantos desafortunados, ingresados en un hospital. Madrid es un polvorín ahora mismo, creo que la incompetencia política está provocando que esto no se pare, aunque también hay mucho descerebrado.
      Gracias, amiga.

      Eliminar
  8. Estimado, mis deseos de una pronta recuperación. Mi país, Uruguay, es algo así como una isla. Vamos bien quizás porque somos pocos o porque la mayoría toma mate o porque estamos muy muy vacunados de todo o ..., la realidad es que no sabemos, la cuestión es que hasta ahora a esto le vamos ganando, un caso de estudio.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muy agradecido, Selva.
      Sí, lo de Uruguay es un ejemplo que ya quisiéramos aquí, tal vez la clave sea la suma de todo lo que dice, sea como sea la verdad es que me alegro por ustedes, nadie en su sano juicio desearía que le fuese mal a otros.

      En España no hemos hecho las cosas bien... y ahora deberíamos estar unidos para luchar contra el virus, pero nada de nada, a veces pienso que somo un país de ineptos.
      Un fuerte abrazo, querida Selva, y siga cuidándose ;)

      Eliminar
  9. Querido Paco, espero que tu evolución siga siendo positiva y que pronto estés escribiendo tus magníficos textos sobre libros y paseos campestres.
    Leo en tus respuestas tu descontento por la actitud de la clase política que nos ha llevado a estar a la cabeza de contagios de toda Europa mientras siguen con sus disputas políticas, un asco.

    Respecto a esa fortaleza y tu gusto por el deporte seguro que es un factor que te ha ayudado para afrontar la adversidad.

    Un abrazo y muchos ánimos para afrontar a este dichoso virus (que por cierto, también ha pillado a Trump................ y no digo más).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola apreciada Laura.
      Ya estoy bien, ha sido una evolución muy buena.
      Pues sí, Laura, si los políticos antes de la pandemia ya mostraban una mediocridad insultante... Ahora ya es un espectáculo absolutamente grotesco, un asco como apuntas con acierto.
      El deporte me ha dado mucho, es un aspecto íntimamente ligado a mi vida.
      Jaja, lo de Trump ha sido buena!!
      Y ahí lo dejo...
      Cuidate.

      Eliminar
    2. Que alegría que el covid haya sido benévolo en tu caso.

      Un abrazo

      Eliminar
  10. Estimado Paco, me alegro que te hayas recuperado de ese trance. Hay que agradecerte la confianza de compartirlo. De todo se aprende y tú transmites muchos valores positivos. Otra vez, gracias y un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  11. Muchas gracias, Luis Antinio.
    El agradecido soy yo por tu presencia.
    Un fuerte abrazo, querido amigo.

    ResponderEliminar
  12. Se nota que eres un resistente, el deporte nos exige y sin duda nos ayuda a superar estas pruebas. El sedentarismo actual, sobre todo entre jóvenes, me parece el peor pasaporte para el futuro y siempre insisto con mis hijos para que estén activos. Al fin y al cabo, es para lo que hemos sido diseñados: para el movimiento. Espero que estés recuperado al cien por cien y puedas seguir con tus paseos literarios y tus fotografías. A mí me tocó la lotería del virus en marzo, es para tomárselo en serio y ser prudentes, pero la vida sigue.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Gerardo, acabo de responderte y no sé que carajo a pasado, mi comentario se ha esfumado.
      He sido muy deportista toda mi vida, pasión que he compartido con mi padre. De pequeño jugaba muy bien al fútbol (herencia paterna), luego me dio por el baloncesto porque tampoco se me daba nada mal (pero mi estatura muy normalita) después el tenis que igualmente se me daba bien... no sé, he tenido una habilidad especial para muchos deportes, ya siendo más mayor escalaba, la mtb, y sobre todo correr en altura por montaña, largas distancias, eso me hizo resistente, sin duda. Ya no mantengo ese nivel, uff. Pero quien tuvo retuvo, jeje.

      Haces bien con tus hijos, yo hago lo mismo con mis hijas, y disfrutan correteando por el campo y siendo activas.

      Pues nada, por aquí seguiremos mientras no decaiga el ánimo o las ganas, que pasan sus zozobras.
      Un abrazo.

      Eliminar
  13. Hola Paco, siento el contagio y celebro la curación; en realidad, si quieres un consejo de colega de enfermedad da igual cómo te hayas contagiado, el origen es indiferente, solo es un paso más por la vida, se lleve por delante cosas o seres queridos, al final es parte de este conjunto de cosas que es el andar por esto que llamamos mundo, o llanura o desierto o vida o lo que sea esto...
    cuídate

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, apreciado Wineruda, se te echaba ya de menos.

      Pues sí, amigo, así habrá que tomárselo, contingencias de eso que llamamos nuestro mundo... o tal vez no sea tan nuestro. Uno ha de seguir hacia adelante, caminando por esta llanura o desierto o lo que sea, como bien apuntas.
      Cuídate ;)

      Eliminar
  14. Llego de casualidad a este blog y justo entre otras entradas leo la ultima. Este virus tiene mal a todo el mundo, todo está de cabeza y realmente no creo que haya una certeza de cómo se produce realmente el contagio. Cuando uno te lee, mas nos vienen las dudas. Lo importante ( y diria muyyyyy) es la condición fisica en la que nos toma por sorpresa, nuestra actitud positiva frente a la enfermedad aun siendo personas de riesgo por afecciones preexistentes, o por lo que fuere y el apoyo familiar , afectivo, que recibamos y con el que transitemos la misma, sin olvidar la fe y la ciencia por supuesto. Un abrazo desde Argentina y brindo por lo bueno que nos has enseñado hoy con tu post.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, Eli. Bienvenida al blog.

      Así es, un mal mundial que los países están enfrentando sin saber muy bien como. Pero saldremos sin duda.

      Para mí el deporte es una escuela de vida, y pienso me ha hecho mejor.
      Fe y ciencia es una combinación fructífera.

      Un abrazo a ti y a la Argentina ;)

      Eliminar
  15. Hola, Paco!
    Lamento acudir tan tarde a estas líneas. Recién hoy me pongo en tema de muchas cosas sucedidas de las que no tenía noticia. Espero que tu experiencia con el CoVid haya quedado atrás y que las perspectivas con la menor de tus hijas vaya mejorando a medida que crece y que el resto de la familia acompañe.
    No puedo hacer mucho desde aquí, salvo teneros presente, haciendo fuerza.
    Recibe un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nunca llegas tarde, apreciado Marcelo.
      En realidad poco podemos hacer ante este panorama, confiaremos en la ciencia.
      Estamos bien. Cuídate mucho amigo.

      Eliminar
    2. Te he enviado un mail a tu cuenta de F. Martínez, pero es posible que no lo frecuentes. Por las dudas, pégale una mirada.
      Un gran abrazo, amigo!

      Eliminar